Los nuevos proyectos de hidrógeno alcanzan números récord a nivel mundial
El Hydrogen Council ha publicado su informe sobre el estado de la industria del hidrógeno, Hydrogen Insights 2022. Según dicho informe, los 680 proyectos a gran escala anunciados a nivel mundial suponen inversiones de 240.000 M$ hasta 2030, un aumento del 50% respecto de noviembre de 2021. Sin embargo, solo 22.000 M$, o lo que es lo mismo el 10% de las inversiones propuestas, han alcanzado la decisión final de inversión, o están en construcción o ya operativas. Las propuestas de inversión deben triplicarse para llegar a 700.000 M$ hasta 2030 para lograr el objetivo global de cero emisiones netas para 2050
La urgencia de aumentar la inversión en proyectos de energía del hidrógeno a escala industrial es mayor que nunca, según un nuevo informe publicado por Hydrogen Council, desarrollado en colaboración con la consultora global McKinsey & Company.
La cartera de proyectos de hidrógeno continúa creciendo, pero el despliegue real se está ralentizando. En 2022, se presentaron unas 680 propuestas de proyectos de hidrógeno a gran escala, equivalentes a 240.000 M$ en inversión directa hasta 2030, un aumento de la inversión del 50% desde noviembre de 2021. Sin embargo, solo alrededor del 10% (22.000 M$) han alcanzado la decisión final de inversión.
Europa alberga más del 30% de la inversión en hidrógeno propuesta a nivel mundial. Sin embargo, otras regiones están liderando la implementación sobre el terreno: el 80% de la capacidad operativa mundial de producción de hidrógeno con bajas emisiones de carbono se encuentra en Norteamérica, mientras que China ha superado a Europa en electrólisis con 200 MW operativos, frente a 170 MW en Europa, impulsada por un fuerte apoyo gubernamental. Corea del Sur y Japón, a su vez, son líderes en pilas de combustible, impulsados por fuertes ambiciones gubernamentales y corporativas: más de la mitad de los 11 GW de capacidad global de fabricación de pilas de combustible se encuentran allí, y Japón ha incrementado el despliegue de planta de cogeneración preparadas para hidrógeno, con 425.000 sistemas de este tipo instalados.
De acuerdo con el Hidrogen Council, la urgencia por invertir en proyectos maduros de hidrógeno es hoy mayor que nunca. El repunte de las emisiones de carbono por encima de los niveles anteriores a la COVID, la invasión de Ucrania y las crecientes preocupaciones en torno a la seguridad energética resultantes de la guerra en Europa; ponen de manifiesto que las economías necesitan hidrógeno limpio, y es necesario actuar para convertir las propuestas en despliegues reales. De los más de 680 proyectos anunciados, 45 proyectos por un valor de 29.000 M$ se encuentran en la fase de diseño de ingeniería inicial y 120 proyectos por un valor de 80.000 M$ se encuentran realizado estudios de viabilidad.
Sin embargo, solo 22.000 M$ (alrededor del 10% de las propuestas) han llegado a la decisión final de inversión o están en construcción o en funcionamiento. Este número solo ha crecido en 2.000 M$ en el último medio año, significativamente más lento que el crecimiento en los anuncios de proyectos.
La barrera clave que enfrentan los desarrolladores de proyectos de hidrógeno hoy en día es la falta de visibilidad de la demanda: muchos están esperando decisiones sobre los marcos regulatorios habilitadores y la financiación para incentivar a los compradores a celebrar contratos de suministro de hidrógeno a largo plazo. Tal compra a largo plazo es clave para desbloquear la financiación de proyectos y el apoyo de los inversores financieros.
Capturar el máximo valor climático del hidrógeno para lograr el objetivo cero emisiones netas para 2050 requiere triplicar la inversión en hidrógeno para 2030 para llegar a 700.000 M$; en otras palabras, inversiones adicionales de 460.000 M$ en proyectos de hidrógeno hasta 2030. Aunque parezca una cantidad enorme, de hecho equivale a menos del 15% de la inversión comprometida en el segmento upstream del sector del petróleo y gas en la última década. A lo largo de la cadena de valor, la inversión en infraestructura que conecta la oferta y la demanda está particularmente rezagada debido a la falta de visibilidad de la demanda, con una brecha de inversión de más del 80% entre las propuestas de proyectos y lo que se necesita para alcanzar el cero neto.
El informe concluye que se requiere una acción urgente y conjunta de los sectores público y privado para pasar de las propuestas de proyectos a las decisiones finales de inversión. Para que la ambición política y las propuestas de proyectos se materialicen en inversiones reales y comiencen a generar beneficios ambientales y socioeconómicos, hoy en día se necesitan condiciones favorables.
