Eficiencia energética: esencia y objetivo de los centros de datos
Los centros de datos profesionales se han convertido en el sistema nervioso de la economía digital, por su rol indispensable en la interconectividad entre usuarios, empresas y servicios. Desde sus inicios hace más de 20 años, el sector tiene un compromiso con la eficiencia y la sostenibilidad de sus instalaciones, que se transmite a los clientes alojados en los centros de datos y desde allí a todo el ciclo de la actividad económica digital que se genera en estos espacios. En este artículo, Robert Assink, Director General de Digital Realty (Interxion) España nos explica las medidas que la compañía adopta para que estas infraestructuras hagan un consumo responsable y sostenible de la energía, entre ellas las firma de PPAs, el uso de combustibles renovables en los generadores o la gestión de la temperatura, entre otras soluciones.
En la gestión de este tipo de infraestructuras Digital Realty (Interxion) implementa diversas medidas para mantener o aumentar los parámetros de eficiencia energética de manera que el consumo energético sea óptimo y responsable. Entre estas medidas, destacan:
- Uso de energía verde certificada en origen.
- Monitorización del PUE (Power Usage Effectiveness).
- Certificación ISO 50001.
- Modernización de los sistemas de refrigeración.
- Control exhaustivo de los elementos de distribución eléctrica.
- Inclusión de elementos que reduzcan las pérdidas eléctricas, como los transformadores o el suministro en alta tensión.
Recientemente la seguridad energética se ha sumado a los factores de riesgo que se consideran en el sector, un problema que se ha visto agravado por el conflicto en Ucrania. Asimismo, la responsabilidad por el cuidado del medioambiente ha llevado al sector de centros de datos profesionales a tomar medidas adicionales. Entre ellas están:
- Acuerdos de compra de energía a largo plazo o PPAs (Power Purchase Agreement).
- Adopción de combustibles renovables como es el caso del biodiésel para los grupos electrógenos.
- Nuevas innovaciones para mejorar la eficiencia en la refrigeración.
- Eficiencia desde el diseño de las instalaciones.
PPAs en el sector de los centros de datos
El crecimiento del sector ha llegado con el desarrollo de la economía digital. En este escenario, los factores relacionados con la planificación de la capacidad energética a futuro y la distribución de la red eléctrica pueden poner en riesgo el suministro a largo plazo.
Por ello, los acuerdos de compra de energía a largo plazo o PPA proporcionan un marco de referencia que garantiza el suministro eléctrico de origen renovable a un precio competitivo. En un mercado caracterizado por el coste volátil de la energía, esta condición de estabilidad hace más fiables las previsiones de costes de gestión de la infraestructura, donde el consumo eléctrico de un centro de datos puede alcanzar hasta un 35% del total de sus gastos. Esta estabilidad se traslada así a las empresas alojadas en los centros de datos, proporcionando un servicio más seguro y sin sobresaltos.
En búsqueda constante de eficiencia y estrategias de sostenibilidad
Los centros de datos son consumidores intensivos de energía; por ello, mantienen parámetros muy elevados de eficiencia energética y buscan el suministro de energía renovable para sus instalaciones.
Las empresas especializadas en la gestión de centros de datos tienen en su ADN la sostenibilidad en todas sus vertientes. Por ello, dicha gestión se basa en estrategias de eficiencia en combinación con iniciativas de sostenibilidad, como la compensación de la huella de carbono que genera nuestra actividad.
Gracias al suministro de energía renovable no se generan emisiones de alcance 2 (correspondientes al uso de electricidad). Sin embargo, hay otros elementos en el centro de datos que generan CO2, como los gases de los equipos de climatización o el combustible de los grupos electrógenos (alcance 1). Precisamente, para reducir este tipo de emisiones, Digital Realty (Interxion) empieza a utilizar combustible renovable en sus generadores, con un 90% menos de emisiones de CO2 durante su ciclo de vida.
Métodos innovadores para alimentar la nueva economía digital
Estamos ante una serie de avances en infraestructura IT cada vez más exigentes en lo que a densidad de potencia eléctrica se refiere. De igual forma, estos equipos necesitan más recursos de refrigeración para su funcionamiento.
En nuestro caso, los centros de datos cuentan con un diseño modular que facilita su adaptación a escenarios específicos, lo que facilita ofrecer a los clientes espacios técnicos con mayores densidades de energía y refrigeración.
El método más utilizado para la gestión de la temperatura en un centro de datos ha sido compartimentar las salas en pasillos fríos y calientes. En los últimos años se ha consolidado la refrigeración líquida como opción válida. También estamos viendo el desarrollo del enfriamiento por cambio de fase, un método que aprovecha el calor latente natural de vaporización de un fluido refrigerante, o, explicado de forma más sencilla, el punto en el que pasa de una fase líquida a una fase gaseosa.
Los centros de datos especializados son impulsores de estrategias novedosas para la eficiencia energética. Sin embargo, el desarrollo de combustibles alternativos (como por ejemplo el hidrógeno verde) no siempre acompaña el crecimiento de las tecnologías disruptivas o de los servicios digitales.
Edificios sostenibles desde el diseño a la operación
Los centros de datos son instalaciones que requieren un uso sostenible de los recursos. Es por ello que sus proyectos de construcción se desarrollan bajo parámetros de sostenibilidad desde el inicio. El estándar de la certificación LEED es uno de estos parámetros, y asegura que la instalación ha sido diseñada pensando en el uso eficiente del agua, la reducción de las emisiones de CO2, la gestión de recursos y hasta en la procedencia de los materiales.
Ser un centro de datos profesional facilita cumplir con muchas de las medidas recogidas en el Pacto por la Neutralidad Climática de los Centros de Datos: energía 100% libre de carbono, prioridad en la conservación del agua, reciclaje de servidores, reutilización del calor y un valor de PUE ajustado a 1,3 en climas fríos y 1,4 en cálidos.
La utilización de energía procedente de fuentes renovables es hoy norma en la mayoría de los grandes proveedores de servicios de colocation. La disponibilidad de energía renovable es hoy un requisito incluido en los objetivos de responsabilidad corporativa. Asimismo, este compromiso de utilizar energía 100% verde potencia la generación de energía renovable y las inversiones bajo criterios ESG (Environmental, Social and Governance).
De hecho, ha aumentado la exigencia de las compañías alojadas en estas infraestructuras en cuanto a las fuentes de energía, la gestión comprometida de los recursos y el compromiso a la hora de aportar soluciones para reducir la huella de CO2. Son los propios clientes quienes requieren un servicio cada vez más eficiente y sostenible para alojar sus equipos IT en un centro de datos especializado.